Las decisiones financieras tienen el poder de transformar la sociedad para bien cuando están guiadas por valores sólidos. Por ello, en Altum Faithful Investing, la promoción de la Vida y la Familia son pilares esenciales en la guía de nuestras inversiones, alineándonos con el Magisterio de la Iglesia Católica y con iniciativas globales que comparten este propósito.
Celebrar la Vida: El Don Más Preciado
Celebrar la vida significa defenderla, protegerla y promoverla desde el momento de la concepción hasta su término natural.
Desde un enfoque empresarial, invertir en sectores que no vayan en contra de la vida, es más que un acto ético: es una manera de contribuir al bienestar integral de las personas y las comunidades.
La Familia: Célula Básica de la Sociedad
La familia es el pilar fundamental sobre el cual se construye la sociedad. San Juan Pablo II subrayaba que «el futuro de la humanidad pasa por la familia«[1]. Esta institución es el lugar donde se forjan las virtudes, los valores humanos y espirituales; y también el espacio donde se forma el carácter de las personas que transforman el mundo y donde se viven y aprenden por primera vez las relaciones humanas.
Ante la crisis actual de la familia, surgen iniciativas y campañas de publicidad, como la última de Volvo Cars, donde se destaca la importancia de la familia como núcleo de conexión y la vida como el bien más preciado.
Apoyar a las familias desde un ámbito empresarial o institucuinal, contribuye al tejido social, y también al desarrollo económico.
Faithful Investing y la promoción de la Vida y la Familia
Las inversiones deben tener un impacto positivo en la sociedad, guiándose por principios éticos y por el compromiso de construir un mundo mejor.
Promover la vida y la familia no es solo un ideal ético; es también un modelo financiero sostenible, donde la rentabilidad y la integridad no tienen por qué estar enfrentadas. Nuestras inversiones son una herramienta poderosa para reconstruir una sociedad donde la defensa de la vida y la familia sean fundamentales para el desarrollo integral de la persona.
Faithful Living. Faithful Investing.
[1] Familiaris Consortio – San Juan Pablo II 1981
