De la mano de AzValor AM y Altum, nace el primer fondo de inversión estilo value con una clara identidad cristiana, Altum Faith-Consistent Equity. La gestión financiera del fondo corre a cargo de la gestora de fondos azValor, mientras que Altum Faithful Investing será la entidad responsable de asesorar a azValor en lo relativo a los criterios éticos de la cartera.
¿En qué consiste azValor AM?
“Mediante la creación de este fondo queremos que el inversor tenga a su disposición un producto que combine lo mejor de los dos mundos: por un lado a una gestión de activos de primera línea, gracias a la gestión de azValor, y por otro la certeza de que todas y cada una de las empresas en las que invierte el fondo respetan en sus fines y criterios los principios de la Doctrina Social de la Iglesia, gracias al asesoramiento de Altum”, señala Borja Barragán, fundador de Altum Faithful Investing.
La distribución del fondo comenzará el 16 de mayo. Tendrá un periodo de preinscripción desde el 16 de mayo hasta el 31 de mayo para aquellos inversores que quieran entrar desde el primer momento, y será a partir del 1 de junio cuando el fondo comenzará a cotizar. El inversor no soportará coste alguno durante el periodo de preinscripción. La contratación podrá realizarse desde cualquier banco con acceso a la plataforma de fondos Allfunds.
La inversión mínima del fondo es de 100 euros para el cliente minorista/retail y de 1.000 euros para el cliente considerado institucional o que esté recibiendo un asesoramiento financiero explícito. El fondo tendrá dos clases: la clase “I” para el inversor institucional o el inversor que pague una comisión explícita de asesoramiento y la clase “R” para el cliente minorista/retail. La comisión de gestión del fondo será del 1,8% anual sobre su patrimonio para la clase “I” y del 2,2% para la clase “R”. El fondo no aplicará comisiones ni en las suscripciones ni en los reembolsos.
Sobre los criterios de inversión, el fondo integra el magisterio impulsado por los tres últimos Papas en los criterios de selección de los activos en los que invierte. En concreto, promoviendo la inversión en empresas que respeten y promuevan la defensa de la vida y de la familia. Igualmente, siguiendo el enfoque de Benedicto XVI en lo relativo a la defensa de la dignidad de la persona. Y por último, plasmando las enseñanzas del Papa Francisco en lo relacionado con la protección y el cuidado de la Creación.
Juan Pablo II resalta en su encíclica Centesimus Annus que la opción de invertir en un lugar y no en otro, es siempre una opción moral, dicen desde Altum. “Nuestro principal objetivo es que todo inversor que quiera invertir según determinados criterios morales no tenga que elegir entre rentabilidad e integridad. Nos hemos preocupado de que este fondo fuese universal (Katholicos en griego), que fuese accesible a todo el mundo (no hace falta ser cliente de Altum para poder invertir en el fondo) y asequible para todos los bolsillos, ya que a partir de 100 euros cualquier persona podrá invertir en él».