En Altum Faithful Investing, creemos que invertir no solo es buscar rentabilidad, sino también actuar con coherencia respecto a la fe y los valores. Cada decisión financiera tiene un impacto en la sociedad, y por eso el Faith-based Investing , o inversión coherente con la fe, se fundamenta en los principios éticos de la Doctrina Social de la Iglesia.
Estos principios se recogen en cuatro grandes pilares:
- La promoción de la Dignidad Humana,
- La promoción de la Vida,
- La promoción de la Familia,
- y el cuidado y la protección de la Creación.
Son ejes que orientan nuestras decisiones de inversión hacia una visión integral del ser humano, buscando siempre el bien común.
La Dignidad Humana: el valor intrínseco de cada persona.
Partimos de una verdad esencial: la dignidad humana no depende de lo que uno tiene, sino de lo que uno es. Toda persona, sin importar su condición, merece ser tratada con respeto y justicia.
Por eso, Altum evita apoyar empresas que exploten o degraden al ser humano, ya sea a través de la pornografía, las adicciones o la explotación laboral.
Además, la libertad religiosa forma parte de este pilar. Una sociedad verdaderamente libre debe permitir a cada persona vivir y trabajar sin conflicto con su fe y su conciencia. Por ello, apoyamos compañías que practican una gestión responsable, con integridad y cuidado hacia todos sus stakeholders.
El Valor de la Vida: invertir sin comprometer la conciencia.
Rechazamos cualquier inversión que directa o indirectamente atente contra la vida humana, fomente el aborto, la eutanasia o la pena de muerte. Nuestro compromiso es proteger la vida desde la concepción hasta la muerte natural, apoyando iniciativas que promuevan una auténtica cultura de la vida.
Desde la derogación de Roe vs. Wade en 2022, muchas empresas estadounidenses han adoptado políticas que financian viajes para abortar o donan a organizaciones responsables de miles de abortos cada año. Invertir con fe significa reconocer que la vida tiene un valor por encima del beneficio económico.
La Familia: célula fundamental de la sociedad.
La familia es el primer espacio donde se aprende a amar, servir y construir comunidad. Es donde se aprende a relacionarse y a vivir en sociedad.
Sin embargo, en la actualidad se intenta desvirtuar la identidad familiar y los valores que la sustentan. En Altum, creemos que fortalecer las familias significa fortalecer la sociedad, por lo que no apoyamos compañías que promuevan ideologías contrarias a la antropología cristiana.
El cuidado de la Creación: custodiar la obra de Dios.
La Creación es un don que hemos recibido para custodiar, no para explotar. Por eso, Altum promueve inversiones responsables con el medio ambiente, que fomenten el desarrollo sostenible y el respeto por la naturaleza como parte de la dignidad del hombre. El cuidado de la creación también es una forma concreta de amar a Dios y al prójimo.
Faithful Living. Faithful Investing.
Los pilares de nuestras guías de inversión son mucho más que un marco ético: son una invitación a vivir la fe en el mundo financiero.
En Altum, creemos que la inversión puede ser un instrumento de transformación, capaz de promover la vida, la familia, la libertad y la dignidad de cada ser humano. Por ello, ponemos a disposición Altum App, para que cualquiera pueda conocer la valoración de las empresas a la luz de estos cuatro pilares.
Invertir es lícito y legítimo. Lo que marca la diferencia es cómo lo haces.